Después de encargarse de Owen Shaw y sus secuaces en la sexta entrega, Dominic Toretto (Vin Diesel), Brian O'Conner (Paul Walker), Letty Ortiz (Michelle Rodriguez), Mia Toretto (Jordana Brewster), Roman Pearce (Tyrese Gibson) y Tej Parker (Chris Bridges) vuelven a los Estados Unidos y comienzan a vivir tranquilamente de nuevo, como siempre habían querido. Sin embargo, el hermano mayor de Owen, Deckard Shaw (Jason Statham), quiere buscar venganza por la invalidez de su hermano y, después de asesinar a Han Lue (Sung Kang) en Fast & Furious: Tokyo Drift, el equipo se dispone a matar al hombre que mató a uno de su familia. El equipo de Toretto viaja por el mundo en busca del asesino de Han, pasando por los Emiratos Árabes Unidos, donde roban el auto del príncipe en su propia fiesta y después lo destruyen.

Dominic Toretto y su equipo reciben la ayuda de un amigo de Hobbs quién a cambio pide que le recuperen el "ojo de Dios", el cual sirve para ver todas la cámaras y dispositivos de audio en el mundo al mismo tiempo y también salvar a la creadora, quién fue secuestrada por un terrorista. Después de salvar a la Hacker creadora de el ojo de Dios, el equipo se dispone a acabar y encerrar a Deckard Shaw en una prisión de alta seguridad, la familia se reúne en una playa y al final le dan una despedida a O´Conner, quién se retira de la saga en la vida real por su fallecimiento y en la película porque tendrá un segundo hijo, por lo que dejará definitivamente las balas y la acción.